Con la llegada del otoño, una vez más llegan los habituales enemigos de los toldos, algo que hoy os queremos recordar desde Toldelux.

Por el simple hecho de encontrar un precio más bajo, en varias ocasiones no nos paramos a pensar en la calidad del sistema que vamos a instalar, lo cual es un gran error. Hay varias amenazas para las lonas de los toldos, como veréis a continuación.

Factores atmosféricos que dañan los toldos

Dado que los toldos están a la intemperie, sus principales enemigos son los factores atmosféricos, como el granizo, la lluvia o el viento. Empezando por el primero, hay que decir que es el oponente por excelencia.

Cuando se produce una granizada se puede llegar incluso a destrozar la lona de un toldo en cuestión de minutos, aunque ésta no sería la única afectada. Los herrajes también podrían verse perjudicados y, por ello, en cuando notes que está cayendo granizo, es muy importante que se recoja el toldo o se tape de alguna manera.

La lluvia, por su parte, y como ya hemos comentado en otras ocasiones, podría llegar a rasgar la lona en caso de que ésta sea muy intensa. En este caso, los herrajes también podrían verse afectado por el peso del agua. Sin embargo, si la lluvia es constante, sigue siendo igual de relevante que se recoja el toldo; la continua exposición al agua puede suponer que coja humedad y que el toldo se pudra.

El viento, a su vez, también puede dañar considerablemente los toldos. Dada su fuerza, podrían romperse tanto la lona como los herrajes, por lo que recomendamos que, si sabéis que habrá fuertes ráfagas, repleguéis el toldo para evitar problemas.

Por último, hay un peligro más para los toldos y que ya hemos comentado hace unas semanas: los excrementos de las aves que pueden generar pequeños orificios en la lona del toldo, que se harán más grandes con el tiempo. Además, no hay que olvidar que los propios pájaros pueden desgarrar la tela.