Aunque a veces experimentamos mal tiempo, con la llegada de marzo también llega la primavera, lo que nos hace pensar en días más largos, llenos de mejores temperaturas y largas horas al sol. Para ello, como sabéis, el toldo puede ser muy útil y ayuda a que se pueda disfrutar mejor de todo esto.

Tras meses de temperaturas bajas, lluvias, o nevadas, es posible que el toldo haya sufrido daños debido a estas inclemencias. Por ello, y aprovechando que aún tenemos unas semanas por delante antes del inicio de la primavera, os recordamos algunas indicaciones para que no tengáis problemas con vuestro toldo.

Consejos básicos para que el toldo esté a punto de cara la primera y el verano

Para que no haya contratiempos y podamos decir que el toldo está listo para usarse, hay detalles a tener en cuenta, como los siguientes:

• Limpieza: Asegurarse de que está limpio es fundamental. Lo importante si no es así es lo limpies con agua tibia, procedente de manguera preferiblemente, y jabón. Si fuera posible, sería recomendable que se aplicase una capa impermeable al final del lavado.

• Lona: Revisar el estado de la tela es primordial porque, si ésta no está en condiciones, pueden darse problemas. Hay que recordar que durante estos meses de invierno podría haberse deteriorado por las inclemencias meteorológicas.

• Estructura: Revisarla, al igual que ocurre con la lona, es otra de las cosas que sí o sí se deben hacer. Para saber si ha sufrido algún daño debido al invierno, habría que abrirlo y cerrarlo varias veces; es la forma más sencilla.

• Daños: En caso de que se haya producido algún daño, lo más recomendable es que acudáis a profesionales como nosotros para que pueda arreglarse o haga las recomendaciones pertinentes.

Si necesitáis de nuestra ayuda, no dudéis en contactar con nosotros para que podamos prestaros el servicio que precisáis.