Aunque no lo creamos, la imagen de suciedad y manchas acumuladas en un toldo es de descuido y dejadez, pudiendo llegar a ensuciar el aspecto externo de nuestra casa aunque la fachada este en perfectas condiciones.

Con el fin del verano y los primeros días del otoño, desde Toldelux os recordamos que es el momento más recomendable para limpiar nuestro toldo, así una vez que llegue el sol habremos dejado el toldo limpio y bien guardado.
Lo primero que podemos hacer es lavar el toldo con una manguera, eliminando la suciedad más general y aprovechar un día de sol para que se seque sin problemas. Posteriormente podemos utilizar un sistema de agua a presión para eliminar de forma sencilla los restos más incrustados.

Si no es posible utilizar estos métodos, podemos frotar el toldo con un cepillo limpio y jabón neutro ya que los toldos suelen estar fabricados de lona o PVC. Si las manchas fueran complicadas, siempre podemos utilizar amoniaco disuelto en agua y pulverizar.Y recuerda: ¡Deja secar bien el toldo para evitar manchas de moho!

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