Cuando hablamos de estores podemos considerarlos los sustitutivos a las cortinas tradicionales de siempre. Estos mantienen la iluminación en la estancia, pero otorgándole un toque de intimidad y modernidad. Existen 2 tipos comunes de estores: los enrollables y los plegables.

Los estores enrollables son más prácticos, ya que no necesitan un mantenimiento particular. Se compone de un tubo que contiene el tejido que se desenrollará según las dimensiones que queremos cubrir en nuestra habitación. Además, estos estores pueden funcionar manualmente o motorizado con mando.

Los estores plegables pueden estar elaborados en diferentes tonos y diseños, de modo que se consigue personalizar la localización donde se quieren colocar. A la hora de limpiarlos son muy prácticos, ya que se componen de varias varillas con velcro para poder plegarlos fácilmente.

Por lo tanto, la elección de uno u otro tipo de estores queda a la elección del cliente según las necesidades que requiera a la hora de encargar la instalación.
Actualmente, la existencia de estos sistemas motorizados han facilitado mucho la instalación y limpieza. Ya que, las antiguas cortinas siempre nos producen mayor pesadez en el momento de descolgarlas para ponerlas en la lavadora. Es importante destacar que los estores, no solo permiten el paso de una agradable y cálida iluminación, sino que, también impiden el paso del escesivo calor o frío extremo que pretende penetrar en el interior de la vivienda.

En conclusión, podemos señalar como ventajas de los estores que evitan esos molestos reflejos y deslumbramientos cuando estamos intentando leer un libro, ver la televesión o trabajar con la pantalla de nuestros ordenadores.

En el caso de que optes por la opción de los estores motorizados, te aconsejamos que te decantes por la marca Somfy. Esta compañía trabaja en más de 45 países y son expertos en fomentar las ventajas de los sistemas con motorización.

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