Ya estamos en otoño y seguro que sois muchos los que tenéis piscina en casa y queréis cubrirla para que el agua no se estropee y, desde Toldelux, queremos hablaros de la opción más recurrida por muchos de nuestros clientes: los cobertores de piscina.

Estos cobertores, también conocidos como mantas, pueden ser de varios tipos:

1. Automáticos tipo persiana
2. De verano o solares
3. De invierno o de protección

Nosotros disponemos de estos dos últimos y de ellos os hablamos a continuación.

Cobertor de verano o solar

En la actualidad, hay distintos modelos. Nos encontraríamos con cobertores de burbujas, cobertores de burbujas reforzadas con rafia, o de espuma. No obstante, todos tienen la misma función: evitar la evaporación del agua y de los productos de tratamiento que ponemos para que ésta se mantenga en perfectas condiciones.

No obstante, debéis saber que dejar una cubierta solar durante la época de invierno, puede suponer que el ésta se termine deteriorando debido a las bajas temperaturas. Es por ello que hay que tener precaución de cambiarla cuando llegue la fecha si no queremos comprar un nuevo cobertor pasado un tiempo.

Cobertor de invierno o de protección

Con este tipo de cubierta no sólo queremos que se proteja el agua de la piscina, sino que también queremos prevenir las posibles caídas de las mascotas, de los niños cuando juegan en el jardín, o de nosotros mismos porque no nos demos cuenta de dónde estamos pisando.

Pueden ser de varios colores, como el azul o el negro, aunque también es usual verlos en verde para que se disimulen mejor con el entorno que les rodea. Se debe tener en cuenta el tipo de anclajes, que puede ser escamoteable en latón o tornillo en acero inoxidable.

Para que haya una mayor vida útil de los anclajes, nuestra recomendación es que los elijáis de acero inoxidable.

Desde Toldelux os animamos a que os pongáis en contacto con nosotros para saber más sobre ellos y, sobre todo, si precisáis de su instalación.