Los motores y automatismos han llegado para hacernos nuestras vidas más sencillas. Gracias a los sensores de la puerta del garaje, ésta no se cerrará si hay algo en el camino. Esto es posible gracias a un sensor eléctrico que cruza la puerta. Cuando uno de los dos sensores no recibe el rayo emitido por el otro, la puerta no se cierra.

En ocasiones, los componentes de estos sensores se pueden desalinear, por lo que la puerta no se cerrará. Pero alinear los sensores de la puerta del garaje es una tarea muy sencilla:

1. Lo primero que debemos hacer es apagar los sensores. Para ello, quita el fusible de tu garaje.
2. Afloja los tornillos que sujetan los sensores de la puerta del garaje, pero sin quitarlos por completo. Los soportes deben poder deslizarse hacia arriba y abajo cuando tú los muevas.
3. Mueve ambos sensores hacia abajo sin desatornillar los soportes.
4. Coge una cuerda y amárrala a uno de los sensores, de manera que si extiendes la cuerda a lo ancho de la puerta del garaje alcance el centro del otro sensor.
5. Amarra la cuerda al sensor opuesto tras pasarla a través de la puerta del garaje. Anúdala de manera que la cuerda pase por el centro de este sensor también.
6. Haciendo uso de un nivel, asegúrate de que la cuerda esté completamente nivelada. Comprueba también que la línea de la cuerda esté de manera horizontal. En caso de que no se encuentre nivelada, ajusta uno o ambos sensores moviendo los soportes hacia arriba.
7. Ahora ajusta los tornillos para que los sensores del garaje se fijen en su nueva posición.
8. Antes de terminar, vuelve a asegurarte de que la cuerda esté nivelada ya que es probable que los sensores se vuelvan a desalinear tras ajustar los tornillos.
9. Finalmente, retira la cuerda y enciende la electricidad de nuevo.

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